Advertencia: He estado luchando contra la depresión desde que tenía 13 años. En los últimos 10,5 años de mi vida, todavía no he encontrado el talón de Aquiles que “arregla” todo.
Pero hay muchas cosas que puedes hacer para ayudarte a salir.
1. Pregunte de dónde vienen sus arrepentimientos. ¿Te arrepientes de cosas que puedes cambiar o mejorar? ¿Estás lamentando errores pasados? ¿Te arrepientes de cosas fuera de tu control? Para mí, a veces se mezclan y forman este monstruo gigante que se arrepiente de sí mismo. ¡No dejes que eso suceda! Clasifíquelos (en una lista, si lo desea) y tache los que no se pueden cambiar. No tiene sentido reflexionar sobre el pasado o los eventos incontrolables, solo te hace sentir peor.
2. Habla con alguien. Un amigo, compañero de trabajo, miembro de la familia, una persona sin hogar en el parque, ¡o incluso un terapeuta! Incluso si todo lo que pueden decir es “lamento que te esté lastimando”, se siente muy bien desahogarme. Lo creas o no, hay alguien por ahí que se preocupa lo suficiente como para escuchar, y es probable que puedan ofrecer un consejo o una condolencia que ayude. Cuando estoy especialmente deprimido, a menudo es lo último que quiero hacer. Pero los pensamientos negativos se ven mucho más pequeños después de que los vocalices.
3. Las distracciones. Haga algo que requiera concentración mental, ya sea videojuegos, cocina, escalada en roca, tocar un instrumento musical o cualquier otra cosa. Es una excelente manera de evitar la espiral descendente que se produce cuando estás mirando a Netflix en la cama y empiezas a concentrarte en pensamientos miserables. Y consejo profesional: es aún mejor si se trata de una actividad nueva. Rompa la rutina, intente lo que siempre quiso poder hacer pero nunca pensó que pudiera. Fallarás las primeras veces, pero practica, practica, practica y construirás un nuevo pasatiempo que te hará una persona aún más interesante.
4. Ejercicio! Alguien más ya se refirió a esto, sé que cuando te sientes mal, parece ser lo último que quieres hacer. Pero realmente ayuda. Personalmente, odio las rutinas de construcción de fuerza ‘machistas’, así que prefiero ir a pasear o jugar con mi perro. ¡Pero para cada uno lo suyo, es realmente útil salir y respirar aire fresco!
5. Otras cosas:
– La comedia de pie es una gran cura para mí, la risa siempre ayuda.
– La medicación me ha ayudado en muchas ocasiones, pero no es para nada una solución, solo una muleta para criarte un poco.
– Las vacaciones son algo que todos necesitan más, incluso si es solo un viaje por la tarde. Ve a un lugar donde nunca hayas estado, explora!
– ¡Mascotas! Los amo. No puedo entender cómo alguien podría vivir sin al menos un gato y / o perro.