Hace varias décadas, un psiquiatra informó que usaba su sentido del olfato con regularidad mientras hacía psicoterapia. Podía distinguir por el olor qué temas estaban realmente molestando a los pacientes, incluso si los pacientes querían ocultar esos problemas profundos.
Puedo oler el miedo, pero solo en los casos en que ha habido una reacción repentina y poderosa. Básicamente, algo te golpea con mucha fuerza y no tienes tiempo de prepararte emocionalmente, tu cuerpo libera hormonas, y también libera sudor y en ese sudor hay una sustancia aromática que normalmente no existe. Lo he olido a mí mismo, y lo he olido a otras personas. Pero es raro que alguien que no vive en un territorio de tigres o algún tipo de entorno similar experimente ese tipo de miedo.