¿Por qué sentimos felicidad y un profundo sentido de respeto al ver a un maestro de clase después de una década, independientemente de si nos gustaron o los odiamos?

Los maestros siempre juegan un papel importante en la vida de los niños. En nuestros primeros años tienen mucha influencia sobre nosotros. Nos gusten o no, no podemos negar el hecho de que una parte de ellos, una parte de sus lecciones siempre se convertirá en parte de nosotros. Se encuentran entre las pocas personas con las que más interactuamos en nuestros primeros años de aprendizaje. Los maestros eran nuestro mundo hasta que nos fuimos de nuestra escuela, por lo que es natural sentirse feliz cuando los ves incluso después de décadas. De repente, los mejores días de tu vida se reviven. Usted ve el edificio de la escuela, la clase, el patio de recreo, los amigos, la hora del almuerzo, los bancos, los libros …
Todo se ve como ayer cuando ves a tu maestro