Depende de las circunstancias individuales, pero en general no lo es.
El llanto es una salida emocional, y reprimir sus emociones no es saludable. Hombre, mujer o niño, todos debemos dejar salir nuestras emociones a veces, y nadie debe sentirse avergonzado por ello.
La razón por la que se repite con tanta frecuencia es porque vivimos en un mundo de roles arcaicos de género, donde los hombres reales son difíciles y no se ven afectados por las emociones. Debido a que el “verdadero hombre no llora” ha existido por mucho tiempo, la gente lo acepta como algo natural y no ve el problema reforzándolo en los demás. Pero esto está cambiando lentamente, y cada vez es más aceptable que las personas estén más en contacto con sus emociones.