Todos nosotros estaremos en circunstancias en algún momento de la vida en donde no nos amontonemos bien contra quienes nos rodean. Algunos de nosotros no somos tan inteligentes como los que nos rodean. Algunos pueden no ser tan fuertes. Algunos pueden no tener tanto dinero. Algunos pueden no contar historias también. Podría ser cualquier cosa, pero seguramente habrá momentos en los que casi todos no puedan competir con las personas con las que están. A veces, esto seguirá siendo el caso durante unas pocas horas y, a veces, podría ser el caso durante días o semanas o años.
Probablemente hay muchos enfoques diferentes que puedes tomar, pero voy a hablar de dos. El primero es el más fácil. ¡Vete de aquí! Ve a otra parte. Deja de salir con la gente que sientes que te avergüenza. Encuentra otro trabajo. Ir a otra escuela Mudarse a otra ciudad.
Lo otro que debes hacer es trabajar en tu sentido del yo y lo que te importa. Medirte a ti mismo por tu belleza parece estar causando un problema. No dices qué tipo de problema. ¿Te hace sentir mal? ¿Te sientes feo? ¿Indeseable? ¿Sientes que la gente te odia? ¿Se burlan de ti?
En cualquier caso, no importa cómo te sientas. Es tu trabajo aprender a lidiar con tus sentimientos. Mi sugerencia es que tomes un enfoque de atención plena. Cuando te sientas inadecuado, o lo que sea que sientas, toma ese sentimiento, obsérvalo, siéntelo y déjalo ir. Recuerda que hay más para ti que cómo te ves. Concéntrese en las cosas que valora, en lugar de las cosas que lo hacen sentir mal.
Aprende a apreciar diversos aspectos de ti mismo. Lo que quieras. No importa. Lo que importa es aprender a apreciar las cosas. Quizás eres un buen pensador. O un buen amigo. Quizás cocines bien. Tal vez tengas buen gusto en la cerámica. No importa. Recuerda estas cosas y tómate un momento para apreciar las cosas que te rodean.
Con el tiempo, aprenderá a dejar de prestar atención a su propio juicio. Tu propio juicio no importará. No importa si sientes que no eres hermosa. Hay otras cosas que aprecias de ti mismo.
Su preocupación acerca de cómo se ve y cómo se compara comenzará a desaparecer. La verdad es que realmente no importa. No hay una sola manera en que se supone que es la vida. Puede ser de cualquier manera y es posible apreciar cualquier cosa sobre su vida. Si te enfocas en lo que aprecias, las comparaciones con otros que no te gustan se volverán irrelevantes.