¿Está bien si mi ex le está diciendo a la gente cómo / por qué rompimos?
No siempre. Hay circunstancias en las que está bien, pero no vas a contárselo a todos.
Si entro en una nueva relación, le diré a mi nueva novia por qué mi ex rompió conmigo. En pocas palabras, yo era un gilipollas colosal para ella. Hice algo de lo que estoy increíblemente orgullosa y la lastimé de una manera que ni siquiera podía comenzar a describir. Fue un acto de máxima traición. Y le diría a mi nuevo compañero porque este acto me afecta todavía, años después de que terminó.
Pero no voy a contarles a todos mis amigos lo que pasó. Les diré que ella rompió conmigo porque era estúpida, pero no voy a entrar en ningún detalle. No es su lugar para saber. Probablemente les diría exactamente lo que les dije arriba. No tiene detalles sobre lo que sucedió y no revelaré ninguno de esos detalles sin una confianza significativa por su parte.
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- Le di a mi novia caros aretes de perlas. Tres días después ella me dejó. ¿Es ella ruda por no ofrecer siquiera devolverlos?
- ¿Qué es el amor y por qué termina durante una ruptura?
- No puedo dejar de pensar en mi ex. Ha pasado un año desde que ella rompió conmigo y todavía estoy atrapado en ese punto emocionalmente. ¿Es malo?
- ¿De qué manera contribuyó usted a la ruptura de una relación? ¿Dónde te quedaste corto?
Se trata de contexto.
Si está sentado con sus amigos, tomando unas copas, refunfuñando sobre cómo lo terminaste, no. Eso para mí está mal. Él no te está siendo respetuoso como persona, como ser humano. Sus amigos no tienen derecho a saber los detalles de lo que pasó.
Si está sentado con su familia o su nuevo compañero, entonces ellos deben saber algo. Después de todo, lo apoyarán y lo ayudarán a superar los problemas de la vida. Deben saber al menos lo mínimo de lo que sucedió.
Si esa charla recuerda lo que sucedió, entonces está bien, pero cuando recurre a quejas y nombres, has ido demasiado lejos.
Sin embargo, creo que las excepciones a la regla de los nombres son las que he empleado. Reconozco que fui una persona muy apreciada, porque realmente lo era. No digo nada de lo que ella hizo, no la llamo, no digo nada que menosprecie a ella. Respeto su decisión, respeto sus acciones, la respeto como ser humano. Y yo también me respeto. No quiero que la gente piense en mí como una especie de niño pequeño e inseguro. Asumo la responsabilidad por las cosas que he hecho mal. Reconozco donde me equivoqué. Admito mis errores. Si es mi culpa que rompimos, lo admito. No embellecen nada, no me exonero, no presiono los factores atenuantes.
Pero más que eso, no veo qué derecho tienen usted o alguno de mis conocidos para saber los entresijos de mi vida amorosa y las razones por las que terminó. Parafraseando a Michael Jackson, “No es asunto de nadie, sino mío y de mi ex”.