El tipo de sonrisas que no son espeluznantes cada vez son las sonrisas que realmente provienen de un corazón amoroso y compasivo. Estas sonrisas no tienen intención.
Sonriendo a la gente para sonreírles es una intención.
Sonriendo a la gente para ser querido es una intención.
Sonriendo a la gente para hacerlos felices es una intención.
A veces estas sonrisas pueden funcionar en la mayoría de las personas, pueden sentirse complacidas con ellas, pero no siempre. La sonrisa inquebrantable, la que tranquilizará a todos, sin importar dónde o cuándo, es la sonrisa que proviene de estar conectado con el mundo, amar al mundo, lo que significa que uno está conectado con uno mismo y se ama a sí mismo.
Un monje sabio que escribe libros nos dijo una vez acerca de los ojos sonrientes.
Él dijo, “sonríe con tus ojos”. ¿Como hacer esto? ¿No es una sonrisa una cosa de boca?
- ¿Por qué a algunas personas (a las que no conoces) les importa preguntar ‘¿Cómo estás?’ ¿Cuando pasas por delante de ellos cuando no les importa nuestra respuesta?
- Me siento perdido física, emocional, espiritual y mentalmente. No puedo encontrar a nadie como yo. Me frustro muy rápidamente por los pequeños errores que la gente comete. Comienzo los argumentos para equivocarme a propósito para tratar de sentirme “normal”. ¿Cómo puedo obtener ayuda?
- Tengo un problema con la creación de redes con otras personas. ¿Cómo puedo mejorar en eso?
- ¿Por qué soy tan imaginativo?
- Cuando no estás seguro del nombre de alguien, ¿cuál es la mejor manera de preguntar ‘¿quién eres?’ ¿A caras familiares cortésmente sin hacerles daño?
Ahora lo entiendo. Ojos sonrientes, ojos que ven con alegría. Los ojos que no hacen que la mente entre en definiciones, los ojos que atestiguan la existencia y descansan en ella. Ser esos ojos tiene un efecto pacífico en nuestros corazones y mentes y se asientan en nuestra expresión en la forma de la sonrisa más amorosa.
Pruébalo. Sonríe con tus ojos.