¿Tienes una relación pasada que recuerdas con gran cariño?

Sí. Mi primera relación fue con un compañero de pregrado que recuerdo con gran cariño. Ambos éramos de la misma edad, teníamos intereses similares, pasatiempos y amigos.

Ella era una persona viva, poseía un tremendo optimismo y siempre se creía que todos tenían un bien inherente a ellos, mientras que yo era narcisista, perezosa y pesimista.

Esta contradicción inherente en nuestra relación la hizo viva. Como yo también era su primer novio, ella me admiraba como una fuente constante de apoyo emocional que no tenía ni idea.

Nos separamos en buenos términos, pero incluso hoy, después de casi 4 años, el pensamiento de ella siempre trae recuerdos alegres y solo un leve sentimiento de arrepentimiento.

PD: Estoy saliendo con mi novia actual desde hace casi 4 años y medio y puedo decir sin lugar a dudas que ella es mi compañera de vida.

¡Oh si! en efecto.
Esto está de vuelta durante el 2010 – 2011.
Por algunas razones que no entiendo completamente, tuve mucha suerte en la tera-de-amour. En términos de cantidad y calidad.
Durante ese tiempo, esta dama en particular con la que había estado era la más apasionada entre las muchas que se encontraron. Lo que teníamos el uno para el otro era lujuria pura y sin diluir.
Cada vez que estábamos juntos, bailamos el éxtasis de la lujuria.
Cada vez que volvíamos a nuestros sentidos nos encontrábamos ansiosamente mirándonos por más.
Cada vez que nos fijamos, prendemos fuego al aire y nos consumimos por el deseo.
Todo lo que tomó fue una mirada.
Ese deseo se extendió en sus ojos, ese fuego se acumuló en mí, y lo siguiente que recordamos fue que ese día se ha convertido en la mañana.
Duró un par de años.
Estar en diferentes ciudades no nos detuvo. Estar en diferentes estados no nos detuvo. Un divorcio no nos detuvo.
Su encontrar amor en esta locura de lujuria no nos detuvo.
El no poder amarla de vuelta no nos detuvo.
Su dolor agonizante de amor no nos detuvo.

No hace falta decir que terminó de una manera muy dolorosa para ella. Ella se mudó de nuevo cerca de su familia.

Me casé. Ella también encontró a alguien que la amaba más que a ella. Acabo de descubrir que ella está casada ahora. Afortunadamente, a eso.

Pero ella es extrañada. No todos son iguales, pero nadie, me refiero a nadie, ha vivido jamás esa intensidad, esa pasión, ese hambre carnal conmigo otra vez.
Sueño con ella cuando estoy solo, a veces incluso cuando estoy con alguien.
Ella sigue siendo la inolvidable.

Sí, pero lo que es más importante, estoy de acuerdo en por qué tiene que terminar y ser un buen recuerdo. Ser realista puede hacer que seguir adelante y vivir hacia adelante sea mucho más fácil