Como con cualquier habilidad de la vida, la práctica es la más útil. Y practicar donde el resultado no importa es de suma importancia.
Entonces, en este caso, le atenderían hablando con todo tipo de mujeres, para que se sienta más cómodo, sin presión sobre su desempeño. Yendo hacia adelante, haz esto. Habla con todo el mundo Pida ayuda al empleado de ventas. Pregúntele a la mujer en la parada de autobús si su autobús se ha ido desde que estuvo allí. Pregúntele a la abuela en el puesto de frutas la mejor manera de elegir una piña (incluso si ya lo sabe, solo practique)
Ahora para esta mujer en particular.
Respira profundamente. Esto te relajará y llevará oxígeno a tu cerebro para que puedas pensar con mayor claridad. Es común en momentos de estrés contener la respiración. Rompe ese hábito.
Ten una sonrisa natural en tu cara. Piense en cómo le gusta a su perro verte al final del día, y te relajas inmediatamente cuando lo ves. O cómo cuando miras en tu armario y te das cuenta de que tu camisa favorita está limpia y lista para usarla en tu gran presentación, sabes que te ves bien y te puedes relajar en ese frente. Piensa en este tipo de pensamientos.
Quita la presión de cualquier interacción particular. Incluso si sientes que has cometido un gran error, está bien. Estás en una curva de aprendizaje. Habrá otras mujeres con las que te podrás relacionar, incluso si ella te rechaza. Y de todos modos, tus debilidades podrían muy bien ser el encanto que la conquista.
Piensa en tus puntos en común. ¿Trabajas o estudias juntos? ¿Viajas en el mismo autobús? ¿Tienes la misma ciudad natal? Aquí es donde encontrarás de qué hablar. p.ej. “Encontré que el examen de ensayo del Prof. M fue realmente intenso. ¿Sobre qué escribiste?”
Una vez que le hayas hecho una pregunta, solo escucha. Es muy común que tu mente corra hacia adelante e intente establecer una nueva conversación. Sin embargo, esto puede hacer que la interacción sea muy inconexa, ya que no está prestando atención al hablante. En cambio, deja que tu mente vaya a donde te está llevando. Entonces, de manera más natural, tendrá una respuesta que “va” con lo que ella le ha dicho. Esto te hace entrar en el flujo de la conversación: esa burbuja en la que sientes que entras cuando todo el mundo se cae, y estás completamente atrapado por el momento.
No seas tan duro contigo mismo. Trata de no juzgar, solo trata de aprender y hacerlo mejor.