La respuesta adecuada a un amigo es ofrecerle una sincera disculpa por su comportamiento inapropiado, pidiéndole perdón y prometiéndole que no volverá a hacerlo. A veces es difícil predecir cómo reaccionarán los demás. Lo que parece una pequeña diversión inofensiva para una persona puede ser interpretado en una luz completamente diferente por otra.
Todos cometemos errores. Con suerte, tu amigo lo reconocerá y te perdonará tu indiscreción. Hacer es más temprano que tarde. Ese sería mi consejo.