Si puedes encontrar a alguien lo suficientemente grande y fuerte para que te recoja. Es posible que puedas hacer un salto en tándem, pero tendrás que preguntar.
Cuando hice un salto en tándem fui atado al pecho de otro hombre. Tenía que ser lo suficientemente fuerte para levantar todo mi peso, llevarme a la puerta y sostenerme allí durante unos diez segundos. Cuando aterrizamos no se me permitió poner mis pies en el suelo hasta que nos detuvimos. Así que tuvo que tomar nuestro peso combinado cuando aterrizamos.