Gracias por la A2A ref.
Tengo una fórmula muy sencilla para resolver mi dilema personal. Cuando me enfrento a una situación muy confusa, me pregunto: “Supongamos que tengo que asesorar a alguien sobre este tema, ¿cuál sería mi consejo?”. Prácticamente esto abre la solución desde una nueva perspectiva. La lógica para esto es muy simple: somos muy buenos aconsejando a los demás, pero somos reacios a seguirlo nosotros mismos. Pruébelo usted mismo y verá cómo la resolución toma forma.
Sin embargo, ya que me ha referido, permítame darle algunas sugerencias para aliviar su problema. En primer lugar, entienda que usted no es la primera o la única persona que experimenta las emociones descritas por usted. Todos nosotros enfrentamos una situación así durante algún tiempo en la vida, pero nunca dura para siempre. Una vez que nos damos cuenta de ciertas verdades básicas en la vida, nos recuperamos.
La mejor manera de animarte es intentar animar a alguien más. Pruébalo, seguramente funciona.
- ¿Es malo ser siempre bueno?
- ¿Cuántas personas están haciendo un esfuerzo para encontrar su espiritualidad?
- ¿Por qué está tan subestimado el tartamudeo? ¿Por qué no hay maneras exitosas de erradicarlo?
- Pregunta que contiene suposiciones: ¿Por qué es que la mayoría de nosotros repetimos a los niños que el mundo no es justo, pero cuando crecemos seguimos esperando que sea justo? ¿No estábamos prestando atención?
- ¿Todos serían más felices, si todos los que tenían una atención excesiva y aquellos que se ignoran excesivamente, cambiaran sus vidas?
Si sientes que eres una víctima de las circunstancias y la vida no ha sido justa contigo, entonces mira a tu alrededor. Hay personas que están mucho peor que tú. Comience ese sentimiento falso de autocompasión y cuente sus bendiciones.
Piense en los aspectos positivos, tal vez su situación podría haber sido peor. ¿No tienes suerte de estar al menos donde estás? ¿Es tu destino tan horrible que necesitas renunciar a la vida tan pronto? ¿Estás exagerando tu problema e imaginando lo peor?
Asegúrate de que eres lo suficientemente inteligente como para resolver tu problema. Dése una charla. No hay mayor potenciador de energía que la confianza en sí mismo.
Tome pasos simples como leer un libro inspirador o escuchar música alegre. Pasee por el parque en medio de la naturaleza y disfrute de las maravillosas creaciones de Dios. Absorber la brisa fresca, la vegetación alrededor, el canto de los pájaros y el susurro de las hojas. Dígase: ¡la vida es tan hermosa! Ver dibujos animados de Tom y Jerry, películas de Charlie Chaplin. Lee las tiras cómicas. Aligerar la situación y cambiar el estado de ánimo.
Finalmente, recuerde que la peor soledad es no sentirse cómodo consigo mismo. Nunca busques tu felicidad en otros que te harán sentir solo. Más bien búscalo en ti mismo y te sentirás feliz incluso si te dejan solo.
Alegrarse. Todo lo mejor !