Ha habido ocasiones en las que he atacado a mi novio en público. ¿Eso me hace una mala persona?

No, en absoluto. Es solo que no puedes controlar tu ira, lo que resulta en tal arrebato. Es solo que tu boca sigue lo que tu cerebro quiere que haga. Es solo que eres muy directo y franco.

Solo tienes que inculcar en tu mente cada minuto que necesites salir de esta enfermedad por el bien de tu relación, porque las palabras una vez habladas no se pueden recuperar. Agredir a alguien especialmente en lugares públicos es muy degradante e insultante. No es tu culpa, es justo que Dios te haya hecho así y necesitas trabajar para solucionarlo.

Nunca arremetas contra un chico en público.

No sabes a qué humillación tiene que enfrentarse. Naturalmente, todo el mundo considera que los hombres tienen la culpa todo el tiempo. Por la humillación y el daño a uno mismo, especialmente en público, nunca se sabe qué podría hacerte.

Mi solución: abiertamente y honestamente, dígale que lo siente y que nunca volverá a suceder.

Asegúrate de nunca pelear en público.