La verdad es que, sin importar cuánto intentes demostrar tu valía, nunca serás lo suficientemente digno, a los ojos de las personas que te rodean. Tratar de ganar su aprobación en cada pequeño paso que tome, le traerá decepciones, abatimiento y un gran dolor de corazón. Tu confianza en ti mismo se hará añicos y tu felicidad volará en alas.
Por lo tanto, le sugiero que, desde mi propia experiencia, sea sabio, acepte la superficialidad de la gente y supérese. Enséñese, no tiene sentido preocuparse por lo que las personas piensan de usted. Está bien si tienen una opinión (buena o mala) y está bien si no la tienen.
¿Quiénes son, para juzgar tu llama, tu caminar y tu charla? ¿Quiénes son ellos para criticar tus esfuerzos? ¿Quiénes son ellos para ser poco lo que creas de tus propias manos? No son más que un saco de piel estirada sobre los huesos y un núcleo hueco. No son más que inseguridad y prejuicios, tratando de traer una obra de arte, tú.
Lo que le pido que adopte, sin duda llevará tiempo, pero le aseguro que es factible. Recuérdese cada día “No puedo ser todo lo que quieren que sea. No puedo ser lo que no soy. Pero puedo ser lo mejor de mí, porque eso es lo que tengo, así que eso es todo lo que puedo. oferta.”
- Si algo te hace sentir bien, ¿significa que es bueno?
- ¿Qué libro / libros está leyendo actualmente, vale la pena leerlo?
- Cómo poner la lógica sobre la emoción en el calor del momento.
- ¿Siempre debes decirle a alguien cómo te sientes, incluso si sabes que no les importa?
- ¿Cuáles son algunas de las emociones que puedes asociar con el hogar?
Le dirán, que la vida no es como la ve, que ellos sepan mejor. Pero en medio de todo el ruido necesitas mantener la calma. Cree en ti mismo. Después de todo, usted está aquí para vivir su vida no, dictada por la opinión de otras personas, sino por libre albedrío. En un mundo que constantemente intenta hacer que te guste el resto, tendrás que esforzarte cada día para mantener tu individualidad.
Nunca te decepciones por esas personas. Conoce tu valor. Depende de tus propios dos pies. Mantén tu cabeza alta. Y enfócate en lo que TÚ quieres!