¿Por qué necesitamos amar nuestro trabajo pero no nuestra empresa?

Porque la empresa siempre cambia pero el trabajo es lo que llevas adelante. Es por eso que todos dicen que amas tu trabajo y no tu compañía. Pero desafortunadamente mucha gente ama la compañía y el trabajo. Conozco a personas de mis organizaciones anteriores que aman la compañía tanto que han estado allí durante 2 décadas.

Las personas que dirigen la empresa y con las que trabaja podrían quererlo, pero la empresa como entidad no puede. Lo más cercano a una compañía que te “ama” es tuyo y sus intereses se alinean, y nada más.

Si usted se aleja de la compañía, lleve las habilidades laborales con usted.

Ame su trabajo pero no ame a su compañía, porque es posible que no sepa cuándo dejará de quererle. Amar tu trabajo es lo que llamamos “PASIÓN”.