El razonamiento seguramente debería ser la herramienta clave, pero sus puntos de datos también deben incluir proyectar consecuencias e imaginar cómo esos resultados lo hacen sentir. Los errores se producen cuando solo considera las consecuencias emocionales inmediatas o permite que pensamientos ilusorios o corruptos corrompan sus datos.
Es por eso que los principios son útiles. Los principios son reglas que predicen resultados. Solo tenemos que adoptar los principios más confiables y confiar en que la experiencia de un número incalculable de personas a lo largo del tiempo o experimentos científicos de alta calidad son nuestra mejor garantía de un resultado positivo.