¿Quién tengo que ser para obtener cierta reciprocidad?

Haga la mayoría de las cosas sin ninguna expectativa de reciprocidad y se sorprenderá de la frecuencia con la que sucede algo parecido a la reciprocidad. No es quién eres, es la actitud que proyectas cuando interactúas con otras personas lo que influye en cómo interactúan contigo. Imponer un sentido inadecuado de obligación a las personas no es una receta para las buenas relaciones.