Por supuesto, pueden estar juntos, pero entren con los ojos bien abiertos: las diferencias culturales hacen que las relaciones a largo plazo sean un desafío particular. Se necesitan personas muy conscientes y comunicativas para hacer que esa relación funcione. Ambos deberán estar dispuestos a comprometerse y, a veces, estar dispuestos a “hacer ambas cosas” en lugar de elegir la religión o la cultura de una persona sobre la otra. Tenga en cuenta si se le pide que sacrifique cosas que son esenciales para su identidad. Sepa que está bien decir que esto no funcionará.
Si tiene tanto respeto y conciencia, las diferencias culturales podrían hacer que esta relación sea particularmente maravillosa. Espero que para ustedes dos.