No debes ser “demasiado” emocional. ¡Ser emocional en la medida en que te haga sentir empatía hacia otro ser humano o que te ayude a tomar ciertas decisiones mejor que la mayoría de las personas es genial! Es muy ventajoso. Pero en el momento en que llevas eso demasiado lejos, estás pidiendo problemas. Una de las desventajas más grandes (pero comunes) que surgen cuando se pone “demasiado emocional” es la hipersensibilidad .
Conozco a personas que son muy emocionales y ese toque extra de emociones los llevó a ser muy sensibles con casi todo. Debido a eso, no solo sus relaciones se rompieron (parentales, románticas, etc.) sino que también redujeron sus niveles de competencia en las cosas que más amaban en un momento (estudios, deportes, etc.) Así que supongo que lo que trato de decir es que ser emocional no es malo. En absoluto. ¡Pero permitir que un aumento en las emociones obstaculice la forma en que regularmente haces las cosas es un gran error!