Sigue el camino de la vieja escuela. Porque hoy en día toda esa esencia está perdida y te servirá como una ventaja.
En primer lugar, asegúrese de estar realmente enamorado de esta persona y dispuesto a hacer todos los esfuerzos para hacerla suya. Te dará suficiente motivación.
Ahora bien, escríbala en una carta de amor que no esté escrita por la sangre que corre por sus venas, sino con una pluma sencilla, por el amor de Dios.
O pídale a esta persona que salga a almorzar o haga algo, y haga arreglos especiales y déles pequeños consejos que le gusten.
NO PROPONGA de inmediato su salida. Ella se irá sin una respuesta. Siempre deje pequeños consejos antes del día D.
Si una vez le ha dicho que se siente bien, tómese el tiempo para absorber la información y hacerle pensar. No le hagas ping o la llames cada segundo para presionarla para que encuentre una respuesta. Dales el espacio y el tiempo para decidir. Y consuélela que no está interesado en que lo guíen y que cree en una respuesta simple y directa que no lo engañe para continuar.
Y, lo que es más importante, pídale que tome las cosas normalmente y no arrastre su amistad existente y dígale que tratará decentemente las consecuencias y que ella no se sentirá incómoda.
Con estas sugerencias, usted está listo para revelar sus sentimientos. Buena suerte.
Si ella dice un sí, no olvides tratarme. Jaja jk.