El desequilibrio hormonal es a menudo la causa subyacente de la depresión. La deficiencia de hormonas tiroideas, testosterona (en hombres) y progesterona (en mujeres) puede llevar a la depresión. Además, hay que tener en cuenta que la deficiencia de vitamina D también puede presentarse con depresión.
Por lo tanto, antes de calificar la depresión como “funcional”, es importante que el médico descarte y trate las deficiencias hormonales. En muchos casos, uno puede encontrar los parámetros tiroideos dentro del rango biológico normal a pesar de la depresión clínica. En tales casos, se ha demostrado que los buenos resultados se basan en el tratamiento clínico con T3 en lugar de la Levotiroxina convencional (Thyronorm, Eltroxin, Synthyroid). Esta también ha sido nuestra experiencia clínica también.