Es importante que los padres entrenen a sus hijos para que crezcan en la vida con confianza. Pero, al mismo tiempo, se les debe enseñar en términos muy claros para reconocer el comportamiento inaceptable de todos y cada uno. También deben ser entrenados para contrarrestar esos avances al instante.
Si los niños aprenden a reconocer situaciones que podrían ser perjudiciales para ellos y reaccionan de inmediato, pondrá a los agresores a la defensiva y evitará que sigan adelante con esquemas pervertidos.