La toxicidad toma muchas formas. Las emociones que son provocadas por el comportamiento tóxico son tan distraídas como las amorosas. Cualquier comportamiento hacia el otro indica una relación. Encontrar a alguien con quien estar en una relación y alguien que se enfoca, es difícil de encontrar. Es difícil ponerse en una posición de inferioridad, pero eso es lo que significa estar en una relación amorosa. Cuando dos personas pueden confiar lo suficiente como para ser románticas, es cuando la distracción comienza a sentirse mejor de lo que uno podría haber imaginado. Nos mantenemos en una relación porque tenemos miedo, de forma similar a como entramos en una relación tóxica porque nos aferramos a los miedos.
Es genial cuando ambas personas se tratan mutuamente con respeto y admiración. Es triste estar involucrado en una relación donde uno o ambos no pueden encontrar el coraje para ser vulnerables, menos egoístas y amorosos.