¿Qué hago si alguien sigue yendo a mi casa pero no quiero hablar con ellos?

¿Qué le impide decirle a la persona que deje de ir a su casa? ¿Necesitas involucrar a la policía?

¿Crees que esperar que el problema desaparezca va a funcionar?

La confrontación es incómoda (para la mayoría de las personas), pero es una habilidad importante para aprender cuando se hace con tacto y respeto. ¿Sería útil que un amigo o alguien de su confianza se comunique con esta persona? No para hablar por usted, sino para brindarle apoyo y para ayudarlo a sentirse seguro de decir lo que necesita decir.

Aquí es donde se establecen límites firmes. Y apegándote a tu decisión.

No quiero que vengas a mi casa, necesito tiempo para pensar, tener mi espacio.

No abra la puerta cuando vengan, déjele saber a los demás en su hogar que no dejen entrar a esta persona.

Haga que los miembros de su familia digan que no está aquí.

O le diré que paraste por ahí, no hagas nada.

Las personas que son lo suficientemente inteligentes respetarán su.

Desafortunadamente, debes hacer lo que no quieres hacer, hablar con ellos. Sea lo más directo posible, dígales que no habla mucho, que no quiere faltarle el respeto, pero apreciaría que no vinieran con tanta frecuencia, trate de ser cortés. Cualquiera que sea su razón, si lo pone en la forma de que le hagan un favor, es probable que respondan favorablemente. Buena suerte. Yo también he tenido este problema, y ​​hasta que usted hable, continuará.

Dígale que tiene más que hacer que conversar con él. Él puede ofenderse pero seguramente estarás libre de ellos que te roben el tiempo.

Pero a esos muchachos les importa que les digas que los conoces cuando estás libre.

Dígales que los ama por lo que son, pero eso no significa que entrometan su privacidad.

He tenido éxito en gran medida al hacer esto: recibo a la persona, le pido que se sienta cómodo y de inmediato me pregunta si puedo hacer algo por él. En el momento en que le respondo, lo cual no toma más de un tiempo calculado de 5 minutos, vuelvo a mi negocio, preferiblemente en otra habitación. Y no vuelvo a él.

Al hacerlo, no lo pierdo, le doy un mensaje a través de mi lenguaje corporal de que estoy listo para ayudarlo pero que tengo más trabajos de imp.

Repito lo mismo cuando venga otra vez.

Simplemente diles que es un comportamiento inexplicable.