Significa que pase lo que pase, pasa. Básicamente, cuando una chica dice que significa que ha tenido suficiente del constante remolino de negatividad, el dolor, el pensamiento excesivo y demás, que fue causado por la persona en quien confiaba y apreciaba. Significa que está dejando que el destino siga su curso en lugar de esforzarse al saber que esa persona considera que sus esfuerzos y tiempo no son apreciados.
Es más parecido a decir “Quiero rendirme, pero todavía quiero darle otra oportunidad a esto”.