Nunca “tratas” con un amigo. Si no se siente cómodo en su compañía o no tiene mucho en común hablar debido a su intelecto, siempre puede dejar la amistad. No hay necesidad de sufrir en semejante amistad. La verdadera amistad es solo cuando ambos pueden disfrutar de la compañía del otro.
En el contador, puedes comenzar a aprender de él y poco a poco ir creciendo a su nivel de conocimiento. Esto te hará otro intelectual y disfrutarás hablando con él más y más. Amistad salvada.