Creo que lo hacemos. Todos estamos conectados pero ¿estamos realmente conectados? No estoy seguro de que esto sea sobre la distancia real entre las personas. Más bien, creo que elegimos mantener a las personas a distancia mediante el uso de tecnología en lugar de métodos “anticuados” para la conexión.
Esto es lo que veo que me preocupa:
– Hemos reemplazado las conexiones emocionales con emoticonos.
– Hemos priorizado la cantidad sobre la calidad en las conexiones (número de amigos de FB o seguidores de Twitter frente a la profundidad en las relaciones interpersonales).
- ¿Por qué la gente piensa que entiende a la gente?
- ¿Qué es la comunicación interpersonal?
- Cuando un gerente se burla constantemente de lo que está haciendo, ¿es una buena práctica de gestión?
- ¿Por qué me preguntaría un chico si yo era más o menos una buena chica?
- Mi padre es super leal a todos y cree que lo sabe todo. Ahora él está retirado y no tenemos ninguna fuente de ingresos. ¿Qué debo hacer y por qué no escucha a nadie?
– Tenemos más fraternidades que amistades. Consulte la publicación de mi blog para obtener una explicación de este término: ¿Amistad o fraternidad?
– Olvidamos que los mensajes de texto, correos electrónicos o publicaciones no transmiten nuestro lenguaje corporal, tono de voz, expresión facial u otras señales de comunicación. Pero aún esperamos que otros lean de alguna manera nuestras intenciones “entre líneas”. Cuando no lo hacen, nos decepcionamos y retrocedemos aún más en lugar de intentar acercarnos de otras maneras que serían más efectivas.
– Las formas de comunicación despersonalizadas hacen que sea más fácil decir cosas que no diríamos en persona. El ciberacoso es prolífico porque no requiere mirar a alguien a los ojos.
– Cuando no nos tomamos el tiempo para conectarnos emocionalmente porque solo nos estamos conectando de manera virtual, perdemos nuestra capacidad de comprensión y empatía.
– Al pensar que debemos estar siempre disponibles para recibir mensajes de texto o llamadas, reducimos nuestra disponibilidad para aquellos que están allí con nosotros físicamente. Nuestra atención está dividida. Mi motivo favorito es ver a las madres de bebés ignorando a sus bebés mientras pasan el tiempo enviando mensajes de texto o hablando por teléfono. Todos nosotros, pero especialmente los bebés, necesitamos y merecemos una atención indivisible y un verdadero compromiso.