¿Puedo dejar una relación para poder dejar mi legado cuando abandone el mundo?

Sí. Deberías dejarla. Si crees que tu única felicidad es tener hijos genéticos con tu cónyuge, y tu cónyuge no puede tener hijos genéticos contigo, debes irte y dejar que esa pobre mujer encuentre a alguien decente para amar.

Debes salir y dejar a tantas mujeres embarazadas como puedas, y luego esperaremos al Cielo que te peguen por manutención en la misma cancha, para que el juez pueda embargar tu cheque de pago en un centavo. (0.05 / dólar, para los lectores no estadounidenses. O equivalente, donde quiera que viva).

Hay un millón de formas de dejar un legado, pero hazlo a tu manera. Estás torturando a una pobre mujer por tu obsesión. Déjala ir. Ella merece un hombre que pueda amarla, no una extraña fantasía cuasi religiosa.

Considera comenzar tu propia religión, por cierto. Ciertamente tienes algo de lo que se necesita.

¿Estás hablando de niños? Mi respuesta asumirá que esto es lo que quiere decir con “legado”.

Consideremos a alguien en la historia de la humanidad que tiene un legado verdaderamente legendario. Hay algunas de esas personas, pero consideremos una: Euclides. Sus descubrimientos han dejado una marca indeleble en eones posteriores. Literalmente ha tocado las vidas de todos los seres humanos modernos, y probablemente continuará haciéndolo durante miles de años en el futuro. Sus aportaciones intelectuales son impresionantes e indiscutibles. Él era un gran hombre.

¿Qué sabes de los hijos de Euclides? ¿Cualquier cosa? ¿Qué sabes acerca de aquellos en la antigua Grecia que tuvieron más hijos que Euclides?

Hay hombres por ahí que dicen haber engendrado cientos de hijos. ¿Miras a estos hombres favorablemente? O, dada la opción, ¿preferirías ser recordado de la misma manera que recordamos a Euclides?

Mi punto es que tener un “legado” implica mucho, mucho más que tener un hijo. Si su legado es lo que le importa, entonces debería estar trabajando para descubrir una contribución intelectual que será recordada por los eones venideros. Si no eres capaz de ese tipo de legado, entonces debes aceptar el hecho de que serás olvidado poco después de morir, sin importar cuántos hijos tengas.

Pero si pasas tu vida con alguien que te ama, llevarás esa vida mucho más feliz de lo que lo hubieras hecho.

Las probabilidades de cada persona en el planeta son precisamente tan incalculables como las suyas, lo que significa que usted no es más especial que nadie. Hace que tu pareja sea igual. ¡Qué incalculablemente egoísta de tu parte para creer que tu legado es mayor que el de cualquier otra persona!