¿Cómo reaccionarías si una persona a la que apoyaste todos estos años, de repente se volviera contra ti?

Mantenga la calma. Las personas en las que más confías pueden darte la espalda en momentos cruciales, y sí, apesta. Y duele. Mucho.
Pero creo que es mejor centrarse en cómo darles la espalda ha arruinado tu trabajo, para centrarnos en cómo podemos solucionar el problema.
Y sobre esas personas, confía en mí un día ellos también aprenderán el dolor. Y no será muy agradable, por supuesto.