Recuerde la ley 2 de las 48 leyes de poder de Robert Greene: nunca confíe demasiado en los amigos, aprenda a usar enemigos.
No te voy a decir cómo usar enemigos hoy, te lo dejaremos para que orquestes. Pero le voy a decir por qué, si no tiene ninguno, debe hacer algunos (y luego aprender a usarlos):
1. Los enemigos pueden y enlazarán contigo
En pocas palabras, si tienes un enemigo, te vigilarán de cerca para esperar a que llegue el momento de saltar.
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2. Si tienes un enemigo, puedes participar en debates en curso, ambos ganan
3. Un enemigo convertido en amigo puede ser un poderoso aliado.
Como señala Greene, un antiguo enemigo será más leal que un amigo, porque tienen más que demostrar. Después de un lapso de tiempo en el que dos personas no están de acuerdo, todavía se está creando una relación entre esos dos individuos. Y al canalizar ese desacuerdo y mala voluntad en una nueva dirección, un enemigo puede volverse un aliado con bastante facilidad, es solo parte de nuestra naturaleza. Con esta nueva camaradería, es probable que ese enemigo se convierta en un aliado extremadamente poderoso, ahora dispuesto a trabajar incansablemente por su causa.
4. Los enemigos te mantienen enfocado en el láser
Tener una némesis es una de las mejores motivaciones para no caer en la tarea de producir resultados de la más alta calidad. Si tienes enemigos que te mantienen enfocado y motivado, considérate afortunado. Proporcionan equilibrio a una ecuación que, de lo contrario, no se puede marcar cuando no tiene ninguna. Después de largos periodos de desequilibrio, es posible volverse complaciente y sufrir estancamiento.
5. Tener enemigos es una señal de prueba social.
Si has llegado al punto en que puedes tener un enemigo, deberías obtener los beneficios de la prueba social. Es una señal para otros a los que vale la pena prestar atención. Las personas se verán obligadas a prestarle atención ya que otra persona que vale la pena le está prestando atención (incluso si es negativa).
6. Los enemigos te ayudarán a causar controversia.
Y la controversia, ingeniosamente dirigida, puede llevar a algunos resultados seriamente poderosos. Al ser ingeniosa la estrategia de tantos en estos días, la controversia es una manera de posicionarse en contra de los demás y destacar.
7. Tire de aquellos que tienen puntos de vista opuestos
Naturalmente, entre los enemigos habrá una división de pensamiento, con personas atraídas hacia ambos lados. Al ser el enemigo conocido de cierta persona o punto de vista, te posicionas para captar la atención del otro lado.
A pesar de lo que te han enseñado, los enemigos son positivos. Y como se dijo al principio, si no tiene ninguno, encuentre la manera de hacer algunos. También una advertencia: cuidado con la forma en que haces enemigos.
La realidad es que es un reflejo de nuestro mundo físico donde las jerarquías de poder son en gran medida una realidad. Aprende a jugar el juego o ignóralo bajo tu propio riesgo.
¡Gracias!