Bueno, en este tipo de situaciones, debes dar lo mejor de ti. Pruebe todas las cosas posibles para que se den cuenta de por qué este matrimonio debería suceder, y si no sucede, cuáles serían las consecuencias. Intenta hasta que tengas tiempo, prueba todos los días y trata de explicarlos con calma.
Incluso después de intentarlo todo, si aún así las cosas no te salen bien, entonces acepta que las cosas deben ser así.
Mi regla es simple. ¡Da lo mejor de ti, y deja el resto a Dios!
Dios te bendiga. 🙂
Gracias por A2A.