A veces sentimos que estamos en una gran multitud, gritando y nadie está escuchando. Sentimos ese nivel de vacío. ¿Por qué?

Primero, ve si te estás escuchando a ti mismo. Luego piensa en los demás. Mira, si puedes estar con el espacio del silencio dentro de ti. Cierra los ojos y respira profundamente. Relájate.
Vean dentro de ustedes mismos. La vacuidad es buena. Muy buena. A veces debe sentir el vacío para darse cuenta de lo LLENA que está con Amor y Alegría. Comprenda que un Poder invisible lo está cuidando y que no está SOLO ni DESPEDIDO, por lo que pueda. Piénsalo. Relájate.

Que mi amigo es el impulso de tener atención cuando has estado sintiendo la escasez de personas confiables en tu vida.
Es natural y ha pasado conmigo también. La mayoría de las personas que terminan sintiéndose solas de esta manera son personas que nunca han sido tan miserables en dar.
Lo que hay que saber por usted es, relájese, deje de esperar a que la gente escuche porque no lo hará, el ángel que está esperando no existe. Agarrate y pasa tiempo de calidad contigo mismo, eres tu propio salvador.
Eventualmente saldrás de este sentimiento y todo estará bien.

No hay otra respuesta reconfortante a esto.

Buda ha enseñado que nacimos solos, morimos solos, vamos solos y venimos solos. Lo que estamos buscando no es un compañero físico, sino un compañero para nuestra alma.