¿Puedes recuperarte después de poner a una mujer en un pedestal?

Bueno, he aquí una idea. No pongas a nadie en un pedestal. No tu amado, tus padres, deportistas o estrellas de cine. De esa manera, cuando hacen algo estúpido, puedes aceptarlo, perdonarlo y seguir adelante. Nadie puede pararse tan alto del suelo sin caerse. Es demasiado para estar a la altura.

Relacione a sus seres queridos como personas, no como elementos de adoración. Las personas reales son un millón de veces más atractivas que las estatuas.