¿Qué debe hacer una persona que ha sido utilizada e hizo una tercera rueda en las amistades para evitar que vuelva a ocurrir?

Encuentra otra cosa que hacer. Haz que sea algo que involucre a otras personas y encontrarás nuevos amigos. Si no está obteniendo lo que necesita de una amistad, una relación de negocios o una relación romántica, debe “votar con los pies”.

Quedarse en una situación en la que se le ignora o se aprovecha de usted es su elección. Te hace sentir inútil. Afortunadamente, usted tiene una opción. A veces puede ser una elección dolorosa. Puede pasar algún tiempo estando solo, hasta que encuentre a esos mejores amigos, pero aprenderá que estar solo no significa necesariamente estar solo.

La solución más fácil: traer una cuarta rueda.

¿Cómo estás siendo usado y cómo alguien más te está haciendo una tercera rueda más allá de tu control?

¿Tus amigos no te dicen cuándo vas a pasar el rato con su pareja allí también?

Esa persona debe salir.

Sentirse como la tercera rueda indica que ciertas acciones les han dado.

Por lo general, en este tipo de situaciones, a la persona en cuestión le resulta muy difícil dejar a su amigo sin importar cómo se sienta. De hecho, la “tercera rueda” comienza a culparse a sí misma por ser demasiado sensible y se acusa de saltar a conclusiones.

Yo digo, vete. Porque al final del día la gente te juzgará incluso si recibes una bala por ellos. No le debemos a nadie una explicación para salvarnos. No tenemos que justificar todas nuestras acciones, especialmente aquellas que se derivan de que nos lastimen.