¿Por qué sentimos que el tiempo ha pasado más rápido cuando nos involucramos con las cosas que amamos?

El tiempo es un concepto hermoso. El tiempo existe SOLO porque las cosas progresan. De no ser así, el tiempo no existiría.

El tiempo es una realización material de las cosas en movimiento.

Algo que realmente amas, disfrutas, quieres que dure más tiempo. Tu cerebro te engaña para que creas que va a durar para siempre, y por lo tanto, la realización material de este artefacto es que el evento se está acabando demasiado rápido. Es la percepción de tu cerebro y la manifestación de la psicología básica que tu cerebro quiere que seas perpetuamente feliz.

Porque cuando amamos algo, no vemos ni escuchamos otros elementos.

El Santo Mensajero del Islam (la paz sea con él y su familia) dijo:

Tu amor por una cosa en particular te hace ciego y sordo.

[`Awali al-La’ali, v. 1, pág. 290, no. 149]

Medimos el tiempo, aparentemente, por el número de cambios de atención que experimentamos.

Soy de la opinión de que tenemos un mecanismo psicológico interno que asume que una cantidad de cambios de atención normalmente debería ocurrir por unidad de tiempo. Sin embargo, cuando se enfoca intensamente en algo, estos cambios no ocurren, y nos sorprende que haya pasado mucho tiempo sin que nos demos cuenta.

Tendría más que ver con la cantidad de enfoque que se dedica a una actividad. Cuanto más piensa la mente en el tiempo, más lento parece correr. Cuando estamos aburridos, esto sucede y cuando hacemos algo que amamos, tendemos a centrarnos en esa actividad tanto que “olvidamos” el tiempo y, por lo tanto, recordamos menos tiempo.

Cuando corro un maratón, no me concentro en el tiempo al comienzo y estoy en el km 10 antes de darme cuenta, a partir de ese momento empiezo a pensar más en la distancia que queda y todo parece ir más lento porque comienzo a centrarme en el progreso .