Esas son llamadas fantasías! No hay nada malo o anormal en ellos. Mis fantasías por lo general corrían con la trama de que me malinterpretaban, que me hacían mal, que las personas se daban cuenta de que soy realmente un gran ser humano y que lo lamentaban mucho. Ah, tan satisfactorio, por razones desconocidas, y realmente no me importa. 🙂
También me gustan tus fantasías. Muy bueno de verdad. ¡Continua!