Puedo decir con seguridad que a menos que solo seamos amigos platónicos (en cuyo caso dividimos la factura), mi compañero o la fecha han recogido el cheque con mucha más frecuencia que yo, independientemente de su origen étnico.
Si bien no me opongo a pagar mi parte de la factura bajo ninguna circunstancia, la única vez que ofrezco retirar el cheque completo es si:
- Lo hizo la última vez y es mi turno.
- Es su cumpleaños o estamos celebrando algo especial para él.
- Perdí una apuesta justa y cuadrada
- Yo gano mucho mas dinero que el
- Me he quedado sin efectivo, por lo que acordamos que él me diera su parte de la factura en efectivo mientras yo resuelvo la factura completa con mi tarjeta de crédito.
- Me lo pasé muy mal en la cita y no quiero volver a saber de él