Lo primero que debes hacer es darte cuenta de que eres una comadreja. Una vez que te des cuenta de esto, la capacidad de manipular las viejas emociones que tuviste con ella debería ser fácil. Cuanto más te des cuenta de que eres un pedazo de “mierda”, más fácil será eludir cualquier idea de culpa que puedas tener por intentar tu comportamiento egoísta y algo malo. Las probabilidades son la mejor manera de jugar con cómo solía amarte.
Para poder hacer esto, me miraría de esta manera. No te preocupes, amigo, no estás solo, hay muchos tipos como tú que hacen esta pregunta. Afortunadamente no soy como tu o ellos.