Depende de la persona. A menudo, es que asumimos que lo bello siempre es invitado y solo los molestamos si nos acercamos. A veces, no sentimos que tenemos una oportunidad. El pensamiento “¿Por qué querrían salir conmigo?” Viene a la mente. A veces, es la idea ridícula de “Ella está fuera de mi liga”.
Probablemente hay más, pero esa ha sido mi experiencia.